Un apellido complicado para una sencilla rockera

- Deberías preguntarle nomás
- No, para qué? viste su apellido?
- Si pero el otro apellido es boliviano …creo (risitas de por medio)
- Ya de bolas, total, que siempre!

Con mi mano en la maquinita que digitaliza mis huellas digitales (más aburrida que militar en presentación de poemario) los miro. Hace más o menos 4 horas que espero que me empadronen en el “maravilloso e incorruptible” (notesé el tono irónico) Padrón Biométrico. Soporté: un sol invernal que bien podría haber frito un huevo en la acera, empujones de doñitas impacientes, las peleas cada 5 minutos de gente que entre cansada y aburrida buscaba camorra por todo y nada. Lo mínimo que esperaba era que se apuren un poquito... pero allí están, cuchicheando entre ellos creyendo que el monitor de la pantalla evitará que los vea y los escuche.

Esto ya es el colmo

- Disculpen señores pero… no deberían empadronarme ya?
- Si señorita – me dice el chico detrás del monitor, que, tras lanzarle una mirada a su amiga continua – teníamos un problema pero ya lo arreglamos…. este… usted con que raza se identifica?
- Qué? – les digo abriendo los ojos como platos.
- Se cree aymara, quechua, meztiza o blanca?- me dice su compañera saliendo de detrás de la compu.
- A qué viene eso? Solo me estoy empadronando para VOTAR! - les digo, pero… siendo que las ganas de pelear se me fueron hace horas… respiro hondo y les contesto – haber... me identifico con la mestiza.
- Con ese apellido? – me responde él en tono de duda.
- Bueno, si va a poner en duda mi respuesta no sé para que me pregunta – digo yo ya al borde de los nervios: tengo una sed increíble, hambre y sé que mi foto saldrá una pena después de que el sol, el viento y todos los agentes naturales del invierno de La Paz destrozaran mi pinta.
- No se enoje señorita, solo hago mi trabajo – me dice, se sienta, anota algo en un cuaderno (no en la computadora) y procede (ahora sí) a empadronarme.

Al cabo de unos minutos me entregan un comprobante de que todos mis datos fueron introducidos con exactitud. Miro la hojita y no veo por ningún lado el ítem: “RAZA con la que se identifica”, a punto estoy de preguntarle pero decido que mejor no, no saco nada con eso y la verdad … solo quiero largarme de aquí.

No es la primera vez que mi apellido es motivo de controversia (esta vez racial por lo visto) siendo los más cuando compro algo de forma “legal” y deben expedir una factura (confusión total).

A todo esto, mi apellido es de origen escandinavo pero muy humilde, popular y nada del otro mundo. Al menos así lo veía yo hasta el año pasado.

Antes de contarselos creo es necesaria una breve aclaración:

La pelea entre Heavy Metaleros y Black Metaleros es ya un clásico cada fin de semana en La Paz (como clásico de futbol). Unos y otros se buscan para gritarse de todo (cumbieros, taparakos, poseros, ratas, y etc etc) e intercambiar pataditas y algunos cortes en la ropa.

En algunos casos la cosa llegó a mayores, razón por la que es preferible no estar metida en el caldo y huirle a ese tipo de peleas que NI TIENEN SENTIDO ni aportan nada bueno a la escena rockera paceña.

Es más, es muy peligroso… por eso la vez que un grupo de chicas oscuras y malvadas fanáticas del death y el black metal me encerraron en el baño de un boliche rockero (boliche en el que tocaban rock re OSCUUUURO y al que fui en franca rebeldía con una polera que pregonaba a gritos mi amor por Bon Jovi) de verdad… sentí miedo.

Invierno 2008 (02:00 am de un sábado)

Encerrada en uno de los cuartitos de baño trato de llamar a mi hermano (que esta con un grupo de amigos a solo metros de donde yo me encuentro) y contestar las insistentes preguntas de las oscuras féminas al mismo tiempo (ya, responde, que haces tú aquí?, tu eres heavy! y etc etc). Al tercer timbrazo caigo en cuenta que mi única opción será salir y dar la cara, total… ya la polera de Bon Jovi está viejita así que rotura más… pintada menos… no le hace (eso si… si me la quitan no se las pondré fácil). A punto de salir escucho que una de las chicas encontró un carnet; instintivamente toco el bolsillo trasero de mi jean y me doy cuenta que es el mio (esito más).

- De donde es tu apellido?, pregunta alguien que seguro comparó la foto con el rostro de la chica que tiene atrapada (es decir.... YO)

Al tiempo que respondo “Finlandia” termino de salir del baño segura de que las oscuras féminas harán tiritas mi polera. Tremenda sorpresa me llevo al ver que me reciben con sonrisas de oreja a oreja, que me llevan con cariño hasta mi mesa (mi hermano estaba ya en medio camino a buscarme pero me ve y vuelve a su sitio), que me invitan tragos de colores y me hablan de que Children of Bodom es muy buena banda... "aunque estos “blacks” no los consideren como un grupo de peso" (me dice una de ellas en susurro), "rockeros tontos no entienden que el verdadero black es FINLANDES como nosotras verdad?" ( me dice otra, bueno... si ella lo dice - pienso-) "y que Kataplexia es increíble, tu seguro los viste en Finlandia... ah... los países escandinavos son la cuna de todo lo que amamos" (dice una tercera dejandome REALMENTE sin saber que decir). Termina la noche y me despiden con abrazos y besos, una hasta dice algo en finés que presumo es como un piropo.

Mi hermano pregunta que quienes eran, yo solo respondo que en realidad no sé, pero .... que si se enteran que ya de finlandeses nos queda solo el apellido y que descendemos de campesinos nórdicos que gustaban de música tipo “polka” pues… otra sería la historia :S

Bueno, no solo Death y Black surgió de los países escandinavos. Justamente Finlandia vio nacer a uno de mis grupos favoritos que, si bien suena medio… malvadito (el nombre sin abreviar es: His Infernal Majesty, H.I.M para los amigos) tiene temas increíblemente bellos (muy góticos algunos, con leves flirteos a amores sangrientos y muertes en pro o por el amor).

Será por que el invierno dura más que en otros lados, qué la luz del día casi… no existe durante esa estación que mucha de su música es tan: oscura, fría, romántica pero melancólica?.

Será que mi apellido suena a todo eso (hielo, oscuridad, melancolía y hasta vampirismo) que por culpa de él: me ralearon de un trabajo "estatal" (asi me dijeron), me miran a veces con rescelo las cajeras? y me preguntan con que raza me identifico? (creanme, esa pregunta solo se hizo a algunos).

A todo esto… serán algunos olvidados genes Finlandeses los que evitan que me guste el calor Cochabambino? (ay Dios, si está la cosa así en Invierno… como será en verano!)

Hasta que lo averigüe los dejo con un video de estos chicos que viven un amor extremadamente gótico, con ustedes H.I.M

Había una vez...

"Bright is the moon,

high in starlight

Chill in the air,

cold as steel tonight

We shift

Call of the wild

Fear in your eyes

It's later than you realized"

(Of Wolf an Man - METALLICA)

Me pregunto hasta que punto puedo ser tan… tan asquerosamente cobarde.

Me doy asco, repulsión y pena. No entiendo que pasa conmigo, no entiendo que hago aquí aun esperándole, aun atenta a cuanto chico cruza corriendo la avenida pensando que es él. Soy patética y estúpida y todos los adjetivos del estilo que existan en el planeta.

Una hora… y él aun no llega, y ni llama aunque... a quien engaño… ÉL nunca llama, solo “hace timbrar”, ah… pero eso es lo de menos no?, en realidad él NUNCA hace nada: ni me lleva a casa, ni quiere conocer a mis padres, ni me agarra de la mano… y si bien ya me conseguí n excusas para justificar sus actitudes con mis amigas no puedo seguir tomándome el pelo a mí misma, habrá que aceptar la verdad. No me quiere.

Si, no me quiere… pero no termina conmigo, ni se enoja, ni me trata mal…

Un momento… SI ME TRATA MAL PUES! , ves?, otra vez lo estás justificando estúpida chiquilla! Y otra vez estás esperando horas a que llegue y te dé por excusa alguna babosada que SEGURO te la vas a creer y sabes porque? Porque eres una cobarde.

Timbra mi celular, pero solo por segundos, es solo un timbrazo y luego otra vez el silencio que es solo interrumpido por el motor de algún auto.

No necesito ni sacar el celular de mi mochila para saber quién es, ni necesitaría en realidad llamarle porque TAMBIÉN sé que es lo que quiere decirme. Seguro no vendrá, y seguro inventará alguna excusa que me tragaré sin chistar, como siempre.

Abro la mochila y saco el regalo que le tenía preparado, ese que me costó un montón y que presumo no se lo merece. Extrañamente el peso del regalo en mis manos me es placentero y familiar… giro el paquete y el papel metalizado brilla con la luz de los faroles de la avenida, “el regalo perfecto para en chico imperfecto en la noche más importante de tu vida” me dijo mi hermana que fue quien en realidad lo escogió y, si bien lo elegido no tiene mucha relación con mi aniversario… me gustó. Pienso que tal vez, inconscientemente deseo matar a mi novio y por eso me atrajo tanto lo que voy a regalarle. Pero no, la que escogió fue mi hermana. NO YO.

Una noche importante….

- Es más una noche de mierda, me digo.

Vuelve a timbrar el celular, me levanto y camino hacia el local de cabinas de la esquina, el frío es tal que me obliga a ponerme la capucha del canguro rojo que hoy llevo puesto y que rehusaba llevar sobre el cabello en un vano intento de verme “impecable”; acelero el paso y llego justo antes de que el chico de las cabinas cierre por completo la puerta.

- Ya no estamos atendiendo – me dice a tiempo de cortarme el paso y lanzarme una mirada entre furiosa y cansada; de repente retrocede, esboza algo parecido a una sonrisa y en susurro dice algunas frases que no alcanzo a entender.

Se acerca un poco a mi y yo retrocedo, me impacta la mezcla de olores que despide su ropa, un mix entre humo de cigarrillo, colonia de pino y algo que no puedo definir; una rápida ojeada a su “look” (chamarra de cuero, polera de Morbid Angel, cabello largo atado en cola) me sugiere que posiblemente sea marihuana o alguna otra yerba alucinógena.

Una vez más timbra el celular en mi mochila.

- Por favor… no tardaré mucho – le digo venciendo mi repulsión, lo empujo y me meto a la cabina sin más permiso que mi propio apuro, me pregunto si vale la pena todo esto. Si el dizque “novio” no me quiere, porque insisto?, porque no puedo solo respetarme a mi misma por una sola maldita vez?. Tomo el auricular, miro al chico de las cabinas que de espaldas a mi aún sostiene la puerta y haciendo uso de mi mejor sonrisa le digo - solo quiero…

- Solo quieres llamarle aunque ÉL SOLO TE HACE TIMBRAR – me dice mientras cierra la puerta y la asegura con llave, ríe y al voltear a verme descubro que sus ojos son dos esferas negras donde no existe absolutamente nada de esclerótica. Siento como los vellos de la nuca se me ponen de punta, de pronto tengo la certeza de que acabo de meterme en un problema mayúsculo, el miedo me satura, cierro la puerta de la cabina como si eso fuera suficiente para salvaguardarme de él, que ahora me aterra.

- Ah… tan tiernita, tan dulce… con esa sangrecita tuya que huele ah… - olfatea el aire mientras se acerca a mi cabina – a capuchino con helado de vainilla…

Jadeo, agarro la manija de la puerta con una mano y con la otra trato de marcar algún número, escucho su risa tras mío al mismo tiempo que descubro que el teléfono está muerto. Volteo pero no puedo mirarle de frente pues temo que me desmaye así que solo atino a mirar el suelo.

- El teléfono no funciona….eh… me voy nomás – le digo tratando de sonar normal. Mi vista se halla clavada en sus zapatos que no se mueven y siguen tapándome la salida. Dios! estoy atrapada…

- Sabes?, te estuve observando - me dice y su voz es mucho más áspera que hace unos momentos, es casi un gruñido que ocasiona que de forma inconsciente lo mire a la cara: Sus cejas ahora son espesas, la barba está a medio crecer, el cabello cae en mechones grasientos sobre sus hombros - Esperaste toda una HORA a tu novio… y no es la primera vez… - sonríe, sus dientes son amarillos y en punta, los colmillos son largos y afilados - Pobre mi dulce niñita asustada… tan de rojo, tan deliciosa… dime, convénceme … siendo que eres tan patética contigo misma, siendo que te quieres tan poquito… dime… POR QUÉ no debería comerte?

Las lágrimas corren silenciosas por mis mejillas, sé que no tengo la más mínima oportunidad: nunca peleé con nadie, nunca pude siquiera defenderme, no puedo ni reclamarle a mi propio novio su falta de cariño… mucho menos podré salir de acá. Dejo la mochila en el suelo, y tiro para atrás mi capucha roja lo que ocasiona que él estalle en risas demasiado animalescas, demasiado NO humanas.

No puedo evitarlo y empiezo a gimotear.

Él deja de reír, retrocede hasta su escritorio, se apoya en él, cruza los brazos y me observa. En sus ojos veo desprecio y pena hacia mí.

- La última vez que nos vimos no eras tan cobarde… me decepcionas, esperaba algo más de ti, mínimamente las preguntas clásicas… - me dice mientras se saca la chamarra y la tira al suelo; sus brazos son muy velludos, las uñas las trae largas, parecen garras.

- Las preguntas clásicas? – digo tratando de no gemir, sé que llorar o tenerme lástima no ayudará en nada, es más… es justo por mi falta de carácter que estoy acá… aunque todo es culpa de él! de ese imbécil que me plantó y todavía quería que lo llame. Ah… ya no vale la pena seguir mintiéndome, a quien engaño?, no es así y lo sé… todo es culpa mía.

- Las preguntas clásicas pues! – me dice bastante fastidiado – lo de: porque tengo los ojos grandes y las orejas grandes y… sabes? mejor olvídalo, está visto que no tienes ni idea de quién eres y eso es aun MAS PATÉTICO para mí: desubicada completamente, sin amor propio… siquiera te preguntaste porque siendo TODA tu ropa negra escogiste hoy una remera roja con capucha?... veo que no, pues bien, créeme, HOY haremos historia y esta vez no habrá ningún cazador que venga en tu ayuda.

Entonces... CASI recuerdo, y digo casi porque en realidad más que un recuerdo en imágenes y sonido es solo la sensación de SABER QUE HACER y… la certeza de SABER quién soy.

Cómo es que pude dudar alguna vez de mi misma?... Cómo pude dejar que alguien me maltratara? Si es claro quién soy!, pienso. Miro al chico de las cabinas cuya boca ya es casi un largo y afilado hocico.

- Casi olvido lo que soy… por poco lo olvido- digo muy bajo e inconscientemente abro mi mochila y saco el que hasta hace unos minutos era el regalo para mi novio.

- Que dijiste dulce niña?, no te escucho bien, porque no sales?, así podremos charlar mejor; que es eso que llevas en las manos? Oh… es un regalo?, quieres convencerme así? jajajajajaja, sí que eres patética, presumo que el comerte será más beneficioso para ti que para mí – me dice el animal de cuento, el asechador, el Lobo que ya solo está a minutos de completar su transformación y entonces… podría ser muy tarde para mí.

Abro la puerta de la cabina mientras desenvuelvo el regalo, la adrenalina satura cada espacio de mi ser, me siento invencible, imponente. Veo que el Lobo se prepara a saltar, me cree inofensiva, una presa fácil y por eso no espera a estar completamente transformado… ese es un error que le costará caro… y es que él no sabe, no llega a intuir que esta vez se equivocó.

Salta y me derriba con su peso, sus manos buscan mi cara mientras su hocico se abre buscando mi cuello. Casi al mismo tiempo mi mano izquierda retira el resto de papel de regalo revelando su contenido: una corta espada celta comprada a un anticuario. Algo en mi ojos, ira reflejada, resolución o que se yo advierte al Lobo que duda por unos segundos y afloja la presión de su cuerpo dándome espacio para clavarle la espada en el estómago.

El golpe es certero, siento la sangre caliente y espesa corriendo por mi mano. El Lobo me mira y sus ojos reflejan confusión, no gruñe, no maldice, vocaliza algo pero al principio son solo sílabas aisladas.

Lo empujo hacia el suelo, me incorporo y lo miro.

Veo que aun no da crédito a lo que pasó, trata de pararse pero veo que no puede, me lanza una última mirada mitad rabia y desconcierto.

- A-si no es el cuen-to, tu eres una ni - ña, no pue-des hacer nada so-la.. no…p…

Calla… sus ojos se quedan mirando el vacío, me acerco hacia él ya sin apuro; sé que no murió, se también que tendré que abrirle el estómago y llenárselo con piedras o lo que tenga a la mano pues en realidad ESA es la parte de la historia en la que intervengo. Sé también que mañana despertará y es posible que no recuerde nada. El humano en el que habita el Lobo tendrá solo una terrible resaca y el estomago revuelto.

Vuelve a timbrar mi celular, suspiro y me dirijo al escritorio del Lobo donde se halla otro teléfono.

Estoy segura que éste si funciona.

Marco el número de mi “novio” y casi al instante me responde, se escuchan risas y música a todo volumen.

- Eres tu Dora?…

- Si

- Por qué no llamas apenas te timbro?, bueno te voy a perdonar esta vez, pero vas a tener que invitarme mañana a almorzar, no olvides traer mi regalo de aniversario…
- No pienso darte nada, en realidad no pienso verte más.
- Qué?, no te escucho bien Dora, estoy con unas amigas.. eh… estudiando… y.. sonará gracioso pero juraría que acabo de escucharte diciendo que no querías verme más…
- Exacto, solo eres una pérdida de tiempo.

Cuelgo, me siento tan ligera y segura de mi misma que la tortuosa tarea de abrir al Lobo ya no se me hace tan pesada.

- Antes Dora, sería buena idea que te quites el canguro rojo de tu hermanita, no vayas a mancharlo aún más con lo que sea que salga del estómago del Lobo y se dé cuenta que lo tomaste “prestado”, sin su permiso – me digo y estallo en risas.

El reloj de pared marca las 09:00 pm, se me ocurre que sería buena idea estar libre a eso de las 10:00 pm. y así poder recoger a mi hermana de casa de la abuela, podría inclusive decirle a la “Abue” que tengo una versión…mmm… interesante de un muy viejo cuento suyo…

1er Cuento de Lucybel

Cuando es con vos ...

A pocos días de cumplir años tuve el mejor regalo de todos los tiempos.

Rebobino:

Algún "tipo" (ente, dizque persona) con la cantidad de neuronas igual a 0 estuvo molestandome los últimos días (bue... como un mes) con timbrazos a altas horas de la madrugada. Ahora se le ocurrió mandar mensajitos extraños... (si si... como soy tonta y me los voy a tragar...).

Este tipo de comportamiento tan... infantil y propio más de un retrasado mental (porfa... hacerme eso A MI... que ya me las sé todas y sé perfectamente como manejar este tipo de cosas) de todas formas tuvo algo positivo. HOY (16 de agosto) sé que POR FIN encontré un equilibrio en mi vida, QUE POR FIN superé mis fantasmas, complejos y demás porquerías que llevaba como mochila en mi espalda y que a veces pesaba montón. Si... hoy todas esas cosas ya no me importan y ese es hoy MI mejor regalo de cumpleaños.

HOY, que este tipo de situaciones (llamaditas de imbéciles, mensajitos de descerebrados) son motivos de mofa, son una broma "entre mis amigos y yo", hoy que tengo a un gran chico en mi vida, hoy que sé que expresar mis sentimientos es LO MEJOR DEL MUNDO, hoy que AL FIN se que quiero pasar el resto de mi vida al lado de alguien (no se si sea con este precioso chico al cual por más que quiero NO puedo encontrarle defectos o tal vez otro), HOY que soy inmensamente feliz y que ruego al cielo (please please) haga completa mi felicidad con Iron Maiden en Bolivia, quiero compartir todo esto con ustedes, solo porque HOY soy demasiado feliz y esta felicidad ya no me cabe en todo el cuerpo.

Mmmm esto me recordó un hermoso tema ... haber... lo adjunto entonces para que no sea esta entrada tan ... PERSONAL ;)



PD:

Siendo que mi novio solto el control de la tele y me pescó escribiendo en el blog,"pegada a la compu" más feliz que cachorro con dos colas me parece que debo incluir algunas cosas que el va diciendo:
- Lu... diles que el amar previene la gripe AH1N1 (por eso por mas que ande desabrigado no la voy a contraer)
- Lucy... diles que por más que lo intentaste NO PUDISTE robarme el autógrafo que Joaquín Sabina me dió en España.
- Lu, diles que te regalé el disco de Led Zeppelin que traje de Buenos Aires, ESO SI es cosa para contarse (jajajajaja).
- Lucybel mi amor... YA VENGA PARA ACÁ y deje de escribir que el especial de Metallica ya comienza.

Bueno... hasta la próxima chicos!

Napalm para tus oidos

Sujeto la puerta de mi habitación lo más que puedo, busco con la mirada algún mueble que pueda servir de tranca para poder tener unos segundos y llegar a mi celular que… ESTUPIDAMENTE yace metros (como kilómetros) lejos de mí, encima de mi cama.

Los golpes en la puerta son cada vez más fuertes, golpes seguidos de gruñidos infrahumanos y risas maquiavélicas…

Tomo la escoba (que se halla apoyada en la puerta) y trato de golpear el colchón para “hacer rebotar” el celular y lograr que llegue un tanto más cerca de mi (si si, suena raro pero funcionó en una peli y hoy CUALQUIER COSA me sirve, la cosa es sobrevivir). Para mi maldita mala suerte no llego ni a rozar la cama.

- Fuck!... haber Lu, estírate… estírate como gato…

A 2 centímetros de alcanzar el colchón siento un golpe fortísimo que casi abre la puerta, suelto el mango de la escoba y empujo con mucha más fuerza atrapando una mano descarnada que destila pus y gusanos y un asqueroso líquido verdoso que presumo tuvo que ser sangre alguna vez.

Lloriqueo, jadeo, por Dios no puedo morir ASÍ!... es muy… muy Hollywood!

- Out of that room girl, quit fighting, you're mine…. MINE!

De espalda a la puerta, con una mano putrefacta y movediza arañando el aire muy cerca a mi rostro me pregunto: Por qué todos los muertos vivientes hablan inglés?, es que los latinos no salimos de parranda después de muertos a comer cerebros? (que presumo debe ser lo que quiere este tipo).

Otro fuerte golpe y caigo al suelo, me semi incorporo presta a defenderme mientras la puerta se abre con violencia.

Frente a mi está él: el muerto viviente, el zombie, el espectro ..… MAS ROCKERO de todos los tiempos.

Sin creer lo que ven mis ojos atino a decir:

- Eddie?... are you the “Eddie” of Iron Maiden?

Casi al mismo tiempo se escucha otro grito proveniente del patio.

- Eddie!!!, Eddie!!!!, Eddie es la última vez que lo repito, baja YA!
- Ya voy pa! – dice el espectro con desgano y franco hastío. Me lanza una triste mirada y se aleja por el pasillo arrastrando una bandera británica tras sí.

No atino a comprender del todo lo que pasa... (dijo... YA VOY PA?)

El sonido del despertador me levanta a tiempo de escuchar (aun entre sueños) al “dueño de casa” decirle a su hijo:

- Te pasas Eddie, son las 8:30!, mañana te despierto a la mala, con agua!.

Ah......... lo que ocasiona una porción de pollo a la broasted ingerida pasadas las 9 de la noche… pesadillas por supuesto, aunque acá entre nos, sé de más de un rockero que hubiera querido tener un sueño como el mío.

Y es que claro, todos queremos ver a Eddie “the head”, mascota de Iron Maiden, que desde el primer álbum de este maravilloso grupo (llamado también Iron Maiden), aparece en las caratulas de todos los discos.

El autor del Eddie más famoso dentro del mundo rockeril… es Derek Riggs, quien se inspiró en una foto publicada en la revista LIFE. Dicha foto es la cabeza de un japonés que cuelga de uno de los costados de un tanque estadounidense durante la 2da Guerra mundial (la foto en cuestión pertenece a un tanque que intervino en la primera ofensiva estadounidense en Guadalcanal), dicho “hobbie” (el colgar cabezas) era muy popular entre los “soldiers” y tenía como objetivo amedrentar al enemigo (eh… mejor no comento).

La foto es esta:

Dicen que la guerra saca: lo animal, lo bizarro, lo oscuro y la locura más perversa en los humanos. Todos estos comportamientos, acciones e historias tan extremadamente macabras en muchos casos (mucho más porque a diferencia de mi sueño… SON REALES) son reflejadas en las maravillosas letras de los temas de Iron Maiden; letras que tienen como fondo musical el speed mas violento, la batería más loca, la guitarra más distorcionada, la voz desgarrada y por supuesto Eddie que es solo el reflejo de lo que un hombre puede llegar a ser en tiempos de guerra.

Comparto con ustedes uno de mis temas favoritos, 2 minutes to midnight, canción que expresa de forma tácita y sin rodeos lo que significa la guerra: juego de intereses individuales, manipulación de “patriotismo” con el único fin del enriquecimiento de unos pocos... Los resultados de esto?, lo dicen los Iron en su última estrofa:

“As the madmen play on words
And make us all dance to their song,
To the tune of starving millions
To make a better kind of gung”